Un nuevo programa informático en 3D ayuda a identificar con mayor rapidez y precisión el sexo y origen anbcestral de restos humanos.
Al
igual que los detectives, la antropóloga Ann H. Ross, de la Universidad estatal
de Carolina del Norte, pasa gran parte de su tiempo pensando en delitos no
resueltos. Su trabajo más reciente ha consistido en desarrollar un programa
informático que ayuda a los científicos forenses a determinar el sexo y los
ancestros de cráneos humanos modernos.
Los
forenses suelen utilizar calibres, unas regletas deslizantes, para determinar
las medidas de los restos. Con ese procedimiento obtienen mediciones
bidimensionales. El programa de Ross, llamado 3D-ID y desarrollado con una beca
del Departamento de Justicia de Estados Unidos, se basa en mediciones
tridimensionales que los científicos realizan con un digitalizador (un
ordenador y un puntero). «El puntero te permite colocar las coordenadas en el
espacio real, con lo que adquieres una idea más clara de la forma biológica que
estás analizando», afirma Ross.
En
un estudio publicado el presente año, el equipo de Ross demostró, a partir de
una muestra de la población española, que el tamaño del cráneo femenino se
había ido acercando al masculino desde el siglo xvi, un hallazgo que tal vez se
pueda aplicar a otras poblaciones. A diferencia de otros programas forenses más
antiguos, el 3D-ID permite prescindir del tamaño en el análisis y, al tener en
cuenta únicamente la forma, logra resultados más precisos. Las imágenes
muestran algunas de las características que usa el nuevo programa para
determinar si un cráneo pertenece a un hombre o a una mujer.
Por : Ana Kuchment, Investigación y Ciencia, 2011